Propiedades de la calabaza en la piel

En esta temporada del año, recogemos y disfrutamos de un fruto muy característico de Halloween, la calabaza.

Es usada no solo para cocinar unos platos deliciosos, sino que además la utilizamos como decoración por el día de los muertos en muchos países.

Los beneficios de este fruto no son tan conocidos, pero tanto la pulpa como las semillas de la calabaza tienen muchas propiedades que vamos a comentar a continuación.

Propiedades nutricionales de la calabaza:

Contiene vitaminas, fibras y minerales. También contiene betacaroteno –cuanto más roja es, más contiene–, que el organismo transforma en vitamina A, vitamina antioxidante que ralentiza el envejecimiento de las células. Una porción de 200 gramos de calabaza cubre las necesidades de vitamina A en un día.

No solo se come la pulpa de la calabaza; sus semillas también son muy preciadas. Son una excelente fuente de hierro, cuya asimilación se ve favorecida gracias a la vitamina C. Sobre todo contiene una fuente de ácido alfa-linolénico, un ácido graso omega 3 esencial normalmente con poca presencia en nuestra alimentación.

Propiedades de la calabaza en la piel: 

Lo que hace que la calabaza sea tan beneficiosa para la piel son sus vitaminas de la cual hay de destacar:

Alfacaroteno, betacaroteno y otros carotenoides (vitamina A) que se encuentran en la pulpa naranja brillante de las calabazas, ayudan a defender las células de la piel contra el daño oxidativo.

Vitamina C, conocida por proteger la piel contra el daño oxidativo derivado de los radicales libres que puede conducir a un tono pobre, a las arrugas y hasta al cáncer de piel.

Vitamina K y algunas vitamina E fundamentales para mantener la piel sana.

El cobre es otro nutriente que es importante para la producción de colágeno y elastina. Además está implicado en la creación de melanina en el cuerpo que proporciona pigmentos para el color de la piel y el cabello.

De forma general, la calabaza nutre la epidermis desde el interior y se recomienda para pieles secas.

Aquí te dejamos unas indicaciones para preparar tu propia mascarilla de forma sencilla, así reutilizas tu calabaza de Halloween y a la vez hidratas tu piel:

Ingredientes:

  1. 3 cucharadas de calabaza (un poco cocida) o su pulpa.
  2. 1 cucharada de aceite de oliva.
  3. 1 cucharada de aceite de argán.
  4. 1 cucharada de miel.
  5. 1 cucharada de leche o yogurt (para la consistencia cremosa).

Mezclar bien todos los ingredientes excepto la leche/yogurt. Si hace falta, usa una batidora. Vuelve a mezclar con la leche/yogurt.

Si quieres que tenga un efecto exfoliante, añade 1-2 cucharadas de azúcar moreno a la mezcla.

Lava tu cara y aplica la mascarilla por unos 10-20 minutos. Puedes aclararlo con agua y después aplicar una crema hidratante como la crema de argán.